Las células cancerosas del mieloma producen una proteína anormal (proteína M y/o una cadena ligera kappa o lambda sérica). Estos análisis de laboratorio se controlan al final de cada ciclo para garantizar que estén disminuyendo. La disminución de las proteínas monoclonales indica que las células cancerosas del mieloma.
No se sabe si el mieloma se hereda por un gen específico, como sucede con algunos tipos de cáncer. Sin embargo, los familiares de primer grado de un paciente con mieloma tienen un riesgo ligeramente mayor que la población general de desarrollar una enfermedad de células plasmáticas (MGUS, SMM, MM).
Mantenerse activo es una parte importante de la supervivencia al cáncer. Cada paciente con mieloma se encuentra en una etapa diferente del tratamiento, por lo que los niveles de actividad pueden fluctuar en función de la energía. Se recomiendan actividades como caminar. También es útil una dieta equilibrada. Hable con su médico sobre los síntomas que está experimentando y que pueden estar interfiriendo con su salud, como insomnio, estreñimiento o diarrea. Si la pérdida de peso ha sido un problema, puede ser útil consultar a un dietista. En general, informar a su médico sobre sus síntomas, grandes o pequeños, le ayudará a crear un buen plan de supervivencia para mejorar su calidad de vida en general.