Síntomas
El síntoma principal del linfoma de Hodgkin es la inflamación de los ganglios linfáticos. La inflamación de los ganglios linfáticos generalmente se debe a una infección, y dicha inflamación disminuye una vez que la infección desaparece. Las personas que tienen ganglios linfáticos inflamados pero que no han contraído una infección reciente deberían consultar al médico de inmediato para determinar la causa. Entre los síntomas del linfoma de Hodgkin, pueden incluirse los siguientes:
Inflamación (pero a menudo sin dolor) de los ganglios linfáticos del cuello (ganglios cervicales o supraclaviculares), las axilas, el tórax, el abdomen o la ingle.

Pérdida de peso inexplicable de más del 10 % del peso corporal en el transcurso de seis meses

Fiebre crónica inexplicable, generalmente diaria, con temperaturas que superan los 38.3 °C

Sudoración nocturna lo suficientemente intensa como para necesitar cambiar las sábanas o la ropa de cama

Debilidad o cansancio

Tos crónica, dolor torácico o falta de aire
