Tratamiento
El tratamiento del cáncer de faringe depende de la ubicación en la faringe (nasofaringe, orofaringe o hipofaringe), el tamaño del tumor y su extensión o diseminación a tejidos y estructuras cercanas. A continuación, se presenta una breve descripción de las opciones de tratamiento para tumores en diferentes partes de la faringe:
Nasofaringe
El tratamiento más común para el cáncer de nasofaringe es la radioterapia dirigida al tumor y a los ganglios linfáticos. La radioterapia puede administrarse a los ganglios linfáticos como medida preventiva, incluso si no se detecta cáncer en ellos. En la mayoría de los casos, excepto en etapas muy tempranas, el tratamiento principal suele ser una combinación de quimioterapia y radioterapia. También se puede considerar una disección cervical para extirpar los ganglios linfáticos y los tejidos o estructuras circundantes del cuello después de la radioterapia si persiste una masa. La cirugía endoscópica o robótica para extirpar el tumor puede ser una opción para algunos pacientes que no responden a la radioterapia.
Orofaringe
Orofaringe (p16+/VPH+): Existen dos tratamientos equivalentes para el cáncer de orofaringe relacionado con el VPH: cirugía robótica transoral (TORS) o radioterapia con o sin quimioterapia. Dado que las opciones de tratamiento han logrado curar estos tumores con excelentes tasas de éxito, los pacientes generalmente tienen la libertad de elegir la opción de tratamiento que mejor se adapte a sus necesidades. Para la enfermedad metastásica, el médico puede recomendar quimioterapia, ensayos clínicos o tratamientos paliativos para reducir el tamaño de los tumores y aliviar los síntomas.
Orofaringe (p16-/VPH): El tratamiento primario para el cáncer de orofaringe no relacionado con el VPH suele ser más agresivo, ya que las tasas de curación suelen ser mucho más bajas. Si los tumores pueden extirparse quirúrgicamente sin afectar gravemente la función de la garganta (como la cirugía robótica transoral), los pacientes pueden optar por esta opción. La cirugía en tumores VPH negativos suele ir seguida de radioterapia, o quimioterapia y radioterapia, independientemente del estadio o el informe patológico. En los casos en que la cirugía no es aceptable ni se ofrece, la quimioterapia y la radioterapia concurrentes dirigidas al tumor y a los ganglios linfáticos ofrecen tasas de curación fiables. En el caso de la enfermedad metastásica, el médico puede recomendar quimioterapia, ensayos clínicos o tratamientos paliativos para reducir el tamaño de los tumores y aliviar los síntomas.
Hipofaringe
El tratamiento principal para el cáncer de hipofaringe es la radioterapia dirigida al tumor y a los ganglios linfáticos. La cirugía seguida de radioterapia es otra opción que puede considerarse en algunos casos. En estadios más avanzados, el tratamiento principal suele ser una combinación de quimioterapia y radioterapia, radioterapia más terapia dirigida, o cirugía seguida de quimiorradiación. Para la enfermedad metastásica, el médico puede recomendar quimioterapia, ensayos clínicos o tratamientos paliativos para reducir el tamaño de los tumores y aliviar los síntomas.
Opciones de tratamiento
El médico puede recomendar cualquiera de los siguientes tratamientos:

Cirugía
La cirugía para extirpar el tumor y el tejido circundante es un tratamiento común para el cáncer de faringe. El médico puede extirpar el tumor endoscópicamente, utilizando únicamente un instrumento delgado y flexible que se introduce por la garganta o con el uso de sistemas quirúrgicos robóticos. En estos casos, la mayoría de los pacientes se recuperan sin necesidad de traqueostomía o gastrostomía. Sin embargo, otros casos pueden requerir una incisión quirúrgica en el cuello, la mandíbula o los huesos faciales. En casos más extensos, el médico también puede necesitar extirpar quirúrgicamente las estructuras cercanas que puedan estar afectadas, como la lengua, la mandíbula, el paladar y la laringe. El médico también puede realizar una disección del cuello, en la que se extirpan los ganglios linfáticos y el tejido del cuello. Algunos pacientes pueden necesitar una traqueostomía o una gastrostomía para ayudarles a respirar y comer.
Radioterapia
La radioterapia utiliza ondas de rayos de alta energía producidas por una máquina para destruir las células cancerosas. Con frecuencia, la radioterapia es el tratamiento principal para los tumores orofaríngeos y nasofaríngeos en etapa temprana. También se administra comúnmente después de la cirugía para destruir cualquier célula cancerosa restante y prevenir una recurrencia. En casos localmente avanzados, la radioterapia puede combinarse con quimioterapia (quimiorradiación) como tratamiento principal. La radioterapia también puede usarse para tratar los ganglios linfáticos del cuello, incluso si no presentan cáncer, o para reducir el tamaño de los tumores y aliviar los síntomas en casos más avanzados.
Radioterapia con haces de protones
La terapia de protones es un tipo avanzado de radioterapia que utiliza protones en lugar de fotones de rayos X para administrar radiación al tumor. En la radioterapia convencional, los haces de fotones pueden depositar radiación y dañar las células sanas al atravesar el cuerpo. La terapia de protones deposita la mayor parte de la radiación directamente en el sitio del tumor, lo que resulta en un menor daño al tejido sano y menos efectos secundarios.
- Consulte Terapia de protones para obtener más información.


Quimioterapia
La quimioterapia consiste en el uso de medicamentos dirigidos a las células de rápido crecimiento con el fin de destruir las células cancerosas. A menudo, se combina con radioterapia (quimiorradiación) para tratar tumores localmente avanzados en la faringe. La quimioterapia también puede administrarse antes o después de la cirugía o la radioterapia para reducir el tamaño del tumor antes de estos procedimientos o eliminar cualquier célula cancerosa restante después de estos. La quimioterapia también puede ser el tratamiento principal en casos muy avanzados.
Terapia biológica/inmunoterapia
Algunos casos de cáncer de faringe contienen células que sobreexpresan ciertas proteínas (proteína EGFR), lo que provoca un crecimiento más agresivo del cáncer. Una terapia biológica, llamada anticuerpos monoclonales, ataca específicamente a estas células, impidiéndoles impulsar el crecimiento celular.
Los inhibidores de puntos de control inmunitario son una forma de inmunoterapia que ayuda a mantener activo el sistema inmunitario en su lucha contra el cáncer. Actúan impidiendo que la respuesta inmunitaria se detenga prematuramente, dándole más tiempo para atacar y destruir las células cancerosas.
En el tratamiento del cáncer de nasofaringe, los inhibidores de puntos de control inmunitario están aprobados actualmente solo para la enfermedad en estadio IV. Pueden administrarse solos o en combinación con otros tratamientos, como cirugía, radioterapia o medicamentos oncológicos adicionales.


Ensayos clínicos
Los ensayos clínicos permiten a los pacientes probar un nuevo tratamiento antes de que esté disponible para el público general. En algunos casos, puede tratarse de un fármaco nuevo que no se ha utilizado antes en humanos, o de un fármaco o una combinación de fármacos que no se utiliza actualmente para ese tipo específico de cáncer. Los ensayos clínicos en fase inicial suelen utilizarse para evaluar los efectos secundarios de un fármaco o una combinación de fármacos, mientras que los ensayos clínicos en fase posterior se utilizan para determinar la eficacia de un nuevo tratamiento para un tipo específico de cáncer. Los ensayos clínicos permiten a los médicos e investigadores mejorar el tratamiento del cáncer con terapias posiblemente más eficaces. Un ensayo clínico puede tratarse de un fármaco nuevo e innovador o puede ser ineficaz. Es importante hablar con su médico sobre las ventajas y desventajas de los ensayos clínicos para su situación particular.