Diagnóstico
Si una persona tiene algún síntoma de cáncer suprarrenal, el médico debe realizarle un examen físico y considerar todos sus antecedentes médicos. Durante el examen físico, el médico debe examinar detenidamente al paciente para detectar cualquier protuberancia o síntoma. Si el médico piensa que existe un cáncer suprarrenal, es posible que recomiende alguno de los siguientes métodos o procedimientos para realizar el diagnóstico y estadificar la enfermedad:

Análisis de sangre
Es posible que el médico recomiende análisis de sangre para medir los niveles de diferentes hormonas en la sangre. La producción excesiva de determinadas hormonas puede indicar un tumor suprarrenal, pero no necesariamente cáncer. Si en los análisis de sangre se detectan niveles elevados de hormonas, lo más probable es que el médico recomiende más pruebas. El médico también puede realizar un análisis bioquímico de sangre para controlar la función orgánica.

Análisis de orina
Tal vez el médico recomiende un análisis de orina de 24 horas para medir los niveles de diversas hormonas en orina. Mediante la obtención de toda la orina por 24 horas, el médico puede medir el nivel promedio de una sustancia en la orina a lo largo de todo el día y comprender mejor qué está sucediendo en el organismo. La producción excesiva de determinadas hormonas puede indicar un tumor suprarrenal, pero no necesariamente cáncer. Si en los análisis de sangre se detectan niveles elevados de hormonas, probablemente el médico recomiende más pruebas.
Tomografía computarizada
Para una tomografía computarizada (TC), usted debe recostarse boca arriba en una mesa mientras un aparato gira alrededor del cuerpo y toma imágenes. Se producen imágenes transversales detalladas del cuerpo, lo cual permite determinar la ubicación exacta del cáncer en el cuerpo y verificar si se ha diseminado a algunos órganos. Una TC puede mostrar el tamaño y la ubicación exactos de un tumor en las glándulas suprarrenales, y si este se ha diseminado a órganos o ganglios linfáticos cercanos. Los médicos generalmente pueden diagnosticar cáncer suprarrenal en función del tamaño y la forma del tumor en una tomografía computarizada. Los tumores suprarrenales malignos suelen ser mucho más grandes que los benignos y tienen bordes que no están bien definidos.
Resonancia magnética
Una resonancia magnética (RM) es una prueba en la que se utiliza un imán de gran tamaño, ondas de radio y una computadora para producir imágenes muy claras del cuerpo humano. Una RM puede usarse para seguir evaluando si un tumor suprarrenal es benigno o maligno.
Tomografía por emisión de positrones
Una tomografía por emisión de positrones (TEP) muestra la actividad y la ubicación de las células cancerosas en diferentes partes del cuerpo en función de los niveles de radioactividad detectados. En este estudio se emplea glucosa radiactiva que es absorbida en los tejidos tumorales y en los lugares de inflamación. Las TEP suelen combinarse con las TC y pueden ayudar a identificar las áreas de cáncer diseminado fuera de la glándula suprarrenal. Los médicos suelen emplear una TEP cuando existe la posibilidad de que el cáncer se haya diseminado, pero desconocen su ubicación.

Biopsia
Las biopsias suprarrenales posiblemente no sean necesarias para diagnosticar cáncer suprarrenal. El cáncer suprarrenal suele aparecer como una gran masa tumoral que requerirá resección. De vez en cuando, puede obtenerse una biopsia si existen sospechas de diseminación fuera de la glándula suprarrenal para confirmar el diagnóstico de cáncer suprarrenal y, algunas veces, el médico puede realizar una biopsia con aguja en un tumor metastásico que se ha diseminado a la glándula suprarrenal desde otra parte del organismo. En estos casos, la biopsia puede ayudar al médico a planificar el mejor tratamiento.