La atención paliativa hace referencia a cualquier forma de tratamiento que recibe un paciente oncológico para aliviar los síntomas y los efectos secundarios de su enfermedad y, así, mejorar su calidad de vida. El objetivo de la atención paliativa no es curar una enfermedad, sino lograr que el paciente se sienta lo más cómodo posible durante esta etapa de su vida. La atención paliativa aborda las necesidades espirituales, emocionales y físicas del paciente y brinda ayuda en relación con determinados asuntos más prácticos. Los tratamientos paliativos que tienden a mejorar la comodidad física pueden incluir medicamentos contra el dolor o las náuseas con el fin de combatir los síntomas y efectos secundarios del cáncer y sus tratamientos. Entre otros ejemplos de tratamientos paliativos, pueden incluirse intervenciones quirúrgicas, radioterapia o procedimientos menos invasivos, como la terapia fotodinámica o con láser, para tratar los tumores que ejercen presión sobre los órganos y nervios o que generan obstrucciones. Si bien estos tratamientos alivian los síntomas físicos y los efectos secundarios para que el paciente se sienta más cómodo, no curan la enfermedad. La atención paliativa también incluye toda ayuda que aborde los problemas espirituales y emocionales en torno al diagnóstico del cáncer, así como inquietudes prácticas, como preguntas legales y financieras. El equipo de atención médica puede derivarlo a consejeros y grupos de apoyo para que usted pueda lidiar con estas emociones y obtener recursos en relación con las inquietudes prácticas. Asimismo, la atención paliativa incluye el apoyo que se brinda a integrantes de la familia, amigos y cuidadores para ayudarlos a manejar las responsabilidades adicionales y las emociones difíciles que van de la mano del diagnóstico que recibe un ser querido.
La atención paliativa se brinda a lo largo de toda la batalla de una persona contra el cáncer. A diferencia de los cuidados paliativos, que se ofrecen para brindar comodidad a los enfermos terminales a medida que se aproximan al final de la vida, la atención paliativa se brinda a lo largo de todo el tratamiento, desde el momento del diagnóstico. Entre otros aspectos, la atención paliativa incluye el apoyo para lidiar con el diagnóstico inicial, cualquier medicamento que se administra para tratar los efectos secundarios del tratamiento, tratamientos más intensivos para reducir tumores en estadios más avanzados, etc.
Los pacientes pueden recibir atención paliativa en un centro oncológico, un hospital, el consultorio médico o el hogar, dependiendo de los tratamientos específicos que se necesiten. Muchos hospitales y centros oncológicos importantes cuentan con centros de atención paliativa, equipos o especialistas como parte del personal para atender las necesidades físicas y emocionales del paciente. A pesar de que algunos hospitales cuentan con centros de atención paliativa especializados, cada vez que el médico aborda los síntomas, los efectos secundarios y las necesidades emocionales de un paciente, está brindando atención paliativa. Con frecuencia, el equipo de atención médica multidisciplinario incluye un especialista en atención paliativa que trabajará con los demás integrantes del equipo para ofrecer una atención óptima. Otras veces, el equipo de atención médica puede estar capacitado en atención paliativa y abordará los problemas como una parte normal del tratamiento.
El propósito de la atención paliativa consiste en aliviar los síntomas físicos del cáncer y los efectos secundarios de su tratamiento para mejorar la calidad de vida del paciente y lograr que se sienta lo más cómodo posible a lo largo de toda esta etapa. Entre algunos de los síntomas físicos frecuentes del cáncer y sus tratamientos, se incluyen dolor, cansancio, náuseas, vómitos, pérdida del apetito, insomnio, fiebre y muchos más. El médico puede recetarle medicamentos para aliviar el dolor y los efectos secundarios, como las náuseas y los vómitos. A veces, el cáncer puede provocar dolor y otros síntomas porque ejerce presión sobre un órgano, nervio o hueso, invade tejido sano o secreta sustancias químicas nocivas. El médico puede recomendarle una cirugía o radioterapia para reducir o extirpar el tumor que provoca los problemas. Además, puede recomendarle otros procedimientos, como bloqueos nerviosos, bombas para administración por vía epidural e intratecal, neuroestimulación eléctrica transcutánea (transcutaneous electric nerve stimulation, TENS) para aliviar el dolor, así como otros procedimientos, como la terapia fotodinámica y la terapia con láser para reducir tumores pequeños. El médico también puede sugerir técnicas complementarias para controlar los síntomas, como meditación, acupuntura, masajes o hipnosis. Por último, usted puede presentar algunos efectos secundarios graves que se originan con los tratamientos oncológicos, como la quimioterapia, la radioterapia y la terapia dirigida. Para ello, el médico puede recetarle medicamentos y ofrecerle consejos útiles para controlar estos problemas.
La atención paliativa también aborda las necesidades emocionales y espirituales de los pacientes. Muchos pacientes y sus familias manifiestan emociones difíciles, como depresión, temor y ansiedad, cuando se enfrentan a un diagnóstico de cáncer y al largo recorrido del tratamiento. Muchos familiares también pueden sentir incertidumbre, preocupación y temor cuando un ser querido recibe un diagnóstico de cáncer. La atención paliativa ayuda a estas personas con servicios como asistencia psicológica, grupos de apoyo y reuniones familiares. Su equipo de atención médica también puede recomendarle un capellán que ofrezca apoyo espiritual y lo oriente a través de esta situación difícil.
Los pacientes oncológicos y sus familias generalmente tienen inquietudes prácticas respecto de las finanzas, el seguro, el empleo y los asuntos legales. El equipo de atención paliativa puede explicarle los detalles técnicos de las distintas leyes y formularios, y orientarlo a través de este proceso para ayudarlo a aliviar esta carga. Asimismo, puede ofrecerle asesoramiento legal y financiero e indicarle recursos útiles a nivel estatal y nacional. La atención paliativa también pueden aliviar la carga de los integrantes de la familia, quienes pueden sentirse abrumados por la responsabilidad adicional de cuidar a un ser querido y manejar otras obligaciones.
La atención paliativa puede aportar importantes beneficios para la salud y el bienestar de un paciente. Los pacientes que reciben un control más adecuado de los síntomas tienen una mejor calidad de vida general, más confianza y seguridad en el médico y más optimismo respecto del tratamiento. Además, están en mejores condiciones de lidiar con la enfermedad cuando los síntomas y efectos secundarios están bajo control. No tema hablar con los médicos y enfermeros ni preguntar acerca del diagnóstico, el plan de tratamiento y el pronóstico. Infórmeles a los médicos si presenta dolor, malestar, síntomas o efectos secundarios. Es importante mantener una buena comunicación con el equipo de atención médica para que los médicos sepan si no se siente cómodo o tiene inquietudes o preocupaciones.