Factores de riesgo
Un factor de riesgo hace referencia a todo aquello que aumente la posibilidad de contraer una enfermedad. A continuación, se detallan algunos factores de riesgo conocidos que inciden en el desarrollo del cáncer de las vías biliares:
Colangitis esclerosante primaria
La colangitis esclerosante primaria (CEP) es una afección en la que las vías biliares se inflaman, lo cual produce su cicatrización patológica y obstrucción. La CEP puede aumentar el riesgo de contraer cáncer de las vías biliares.


Edad
El riesgo de contraer cáncer de las vías biliares aumenta con la edad. La mayoría de las personas que contraen la enfermedad son mayores de 65 años de edad.

Tabaquismo
El riesgo de contraer cáncer de las vías biliares es mayor en las personas que fuman.

Obesidad
Las personas que tienen un sobrepeso considerable o que son extremadamente obesas presentan un riesgo mayor de contraer cáncer de las vías biliares.
Cálculos en las vías biliares
Los cálculos biliares son acumulaciones endurecidas de colesterol y otras sustancias que se encuentran en la vesícula biliar y las vías biliares. Pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de vías biliares.
Quistes de colédoco
Los quistes de colédoco Son bolsas que se forman a lo largo de los conductos biliares. Si no se tratan, pueden obstruir el flujo biliar y causar inflamación, lo que a su vez puede provocar cambios precancerosos que aumentan el riesgo de cáncer de conducto biliar.
Reflujo del conducto pancreático
El reflujo del conducto pancreático es una afección en la cual los jugos del páncreas vuelven a las vías biliares. Esta afección puede aumentar el riesgo de contraer cáncer de las vías biliares.
Enfermedad inflamatoria intestinal
Las enfermedades inflamatorias del intestino, como la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, están relacionadas con el PSC y pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de las vías biliares.

Hepatitis crónica
Las personas que presentan infecciones crónicas por hepatitis tienen un riesgo mayor de contraer cáncer de las vías biliares intrahepáticas.
Cirrosis
La cirrosis tiene lugar cuando las células hepáticas dañadas se reemplazan con tejido cicatricial. La cirrosis suele deberse al alcoholismo o a la infección crónica por hepatitis B y hepatitis C. La cirrosis hepática aumenta el riesgo de contraer cáncer de las vías biliares.
Parásito trematodo hepático
Los parásitos hepáticos son diminutos que viven en las vías biliares. Las infecciones por parásitos hepáticos son poco frecuentes en Estados Unidos, pero son más comunes en el sudeste asiático, donde pueden transmitirse por el consumo de pescado crudo o poco cocido. Estos parásitos pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de vías biliares.