Factores de riesgo
Un factor de riesgo es una característica, una conducta o una afección que aumentan las posibilidades de contraer una enfermedad. Los factores de riesgo más importantes que inciden en el desarrollo del cáncer de cabeza y cuello son el tabaquismo, el consumo de alcohol y las infecciones del virus del papiloma humano (VPH). Estas sustancias o virus producen daño genético a las células escamosas que forman el recubrimiento interno de las estructuras que se muestran en la página anterior, y cumplen una función significativa en la mayoría de los cánceres de cabeza y cuello. Entre los factores de riesgo que inciden en el desarrollo del cáncer de cabeza y cuello, se incluyen los siguientes:

Tabaquismo
El tabaquismo es la causa principal del cáncer de cabeza y cuello. Los cigarrillos y el tabaco sin humo inciden en más del 85 % de los casos de cáncer de cabeza y cuello.

Consumo de alcohol
El consumo frecuente o excesivo de alcohol aumenta el riesgo de contraer cáncer de cabeza y cuello. El consumo conjunto de tabaco y alcohol aumenta el riesgo aún más.

Virus del papiloma humano
El virus del papiloma humano (VPH) es una infección de transmisión sexual que afecta células en la garganta. Debido a esta afección, aumenta el riesgo de padecer cáncer de cabeza y cuello, en especial cáncer de orofaringe.

Virus de Epstein-Barr
El virus de Epstein-Barr (VEB) hace referencia a una infección crónica que causa mononucleosis y que permanece latente en las células de la garganta y el sistema inmunitario. La infección por este virus se asocia con el desarrollo de cáncer de nasofaringe.


Género
El cáncer de cabeza y cuello es dos a tres veces más frecuente en hombres que en mujeres.

Alimentación deficiente
La carencia de vitaminas A y B aumenta el riesgo de contraer cáncer de cabeza y cuello.

Higiene bucal deficiente
La higiene dental deficiente puede aumentar el riesgo de contraer cáncer de cabeza y cuello.
Enfermedad por reflujo gastroesofágico
El reflujo ácido o la enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE) pueden aumentar el riesgo de contraer cáncer de cabeza y cuello.


Exposiciones debido a la ocupación o el medioambiente
La exposición a determinados productos químicos y sustancias, incluidos el amianto, el aserrín y los vapores de la pintura, aumentan el riesgo de que una persona contraiga cáncer de cabeza y cuello.
La medida más importante que usted puede tomar para prevenir el cáncer de cabeza y cuello es evitar por completo los productos que contienen tabaco. El riesgo de contraer cáncer de cabeza y cuello se reducirá considerablemente si usted deja de fumar o de usar productos de tabaco sin humo. El organismo incluso puede revertir la mayor parte del daño genético ocasionado por estos productos en el transcurso del tiempo.